El Guerrero Medio Muerto
Historia Corta Por
D.E.J.QUILO©
En un tiempo de oscuridad en medio de la decadencia,
sucio, con las ropas rasgadas y herido, allí estaba el guerrero sobre sus
rodillas, después de haber aniquilado a 800 monstros llamados decisiones, el
estaba solo y sin nadie a su lado, nada más que con su espada, el solo había
hecho tal hazaña después de haberse humillado así mismo, se levanto apoyándose
en su espada y como un hombre común exhaló un suspiro, vio a su alrededor y
todos los monstros estaban muertos, pero a lo lejos el guerrero se percato que
la batalla no había terminado aun, pues dando pasos ligeros y zancadas largas,
venia un monstro aun mas grande llamado duda, pero el guerrero no daría un pie
atrás, enfrentaría al más temible de los males.
El guerrero tomo su espada, la sostuvo firme entre su
mano ya cansada, pero en su corazón había una fuerza incansable y inagotable la
cual llenaba sus músculos de fuerza más que humana, la bestia se abalanzo sobre
él, el guerrero brinco como gacela a un lado, la bestia había fallado en su
primer golpe, pero el guerrero corrió rápida mente y despiadadamente tumbo un
golpe firme sobre la bestia, a la cual esta rugió de dolor, pero la bestia no
iba a detenerse, daba golpes por montones, pero el guerrero era ágil y de todos
los golpes que la bestia había lanzado en contra del guerrero, ni uno había acertado, pero el
guerrero con paciencia de a poco había desangrado cortando la dura armadura de
tal bestia, de pronto la bestia sucumbió, inclinándose hacia adelante cayó de
rodillas, el guerrero ensangrentado, sobre su armadura y sus ropa raída, estaba
manchado de la sangré de la bestia, la cual no había podido tocar ni acertar
ningún golpe de muerte al valiente guerrero, pero en la guerra todo es balido,
el humilde guerrero estaba a un lado de la gran bestia y cuando estaba a punto
de cortarle la cabeza, una flecha que salió de un lugar desconocido, le
atravesó el hombro, el guerrero no dejo su espada, cayó sobre sus rodillas
estaba herido pero no de muerte, y como todo un valiente, se arrancó la flecha
y la saco de su hombro.
Después de haber vencido al gigantesco monstro, el
guerrero herido y cansado se quedo echado en el suelo, por un instante, luego
tomo su espada, se apoyo en ella y la uso como muleta, y el guerrero prosiguió
su camino, camino y camino, pero cuando estaba a punto de estar lejos de la guerra
un ejército de 900 monstros venían a su encuentro, y todos tenía el tamaño del
gigante que había vencido hacia unos instantes, no era posible pero era cierto,
unos se llamaban orgullo y desprecio, otros se llamaban duda y desánimos, pero
el guerrero llevaba un nombre escrito en sus brazos, fe y animo, los cuales le
daban el nombre al guerrero, Feanimo, era su nombre, y su espada afilada la
cual el guerrero llamo, Idea, era tan afilada que partía las piedras más duras.
Aunque nadie lo crea, el valiente guerrero llamado
FeAnimo, y su afilada espada Idea, vencieron al ejército de 900 monstros, y
vencieron no porque su historia viviera toda una eternidad, sino por humildad
para que los que supieran su historia no olvidaran el principio de todo y de
ellos mismos, todo tiene un principio y todo tendrá un fin.
El guerrero volvió a su camino, hasta que un día murió
de viejo, pero la hazaña que hizo nadie la olvido nunca.
Ser diferente es ser despreciado, ser diferente es ser
humillado, pero no importa saca al guerrero, el campo de batalla está en tu
mente solo tú puedes vencer a los grandes monstros, los cuales salen de las
bocas de mochos y entran por nuestros oídos y se alojan en nuestra mente, pero
cuando los venzas, dejaras historias que nunca se olvidaran.
Mi Amigo Fe..Animo.
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