El Día En que La Muerte Renuncio a su Trabajo
Historia Corta por
Elías Quilo
©D.E.J.QUILO
Solitaria y sin amigos, cansada de lo mismo, con su
sotana negra y su guadaña, sentada en una cilla en la casa de un viejo
proxeneta, esperando la oportunidad en la que el viejo muriera del corazón,
pues como un adicto al sexo, una mujer no era suficiente, esa noche del 10 de Diciembre,
este viejo inconsciente estaría con dos mujeres a la misma vez en esta
cataléptica noche. Comenzó la noche imparable, de copas de vinagre cual sidra,
cigarros y condones, el viejo tenía la edad de 61 años, pero el viejo aquí, no
es el protagonista, en medio del sexo tendría que ocurrir un fallo del cansado
corazón, mientras la muerte sentada en una cilla esperaba la trágica ocasión, después de pasado un
tiempo se cansó de esperar, la delgada solitaria y blanquecina cara del adiós
se había desesperado, la muerte no soportaba mas esperar a la tragedia, aunque
nunca faltaba a la cita, para ella el tiempo era muy tardado, nunca le habían
visto ni conocido, pero hoy revelaría su dulce apariencia, tomo su guadaña, la
comenzó a desarmar, y la dejo a un lado, mientras la muerte dejaba su guadaña,
a unas cuantas cuadras un hombre se atragantaba y se ponía azul, por tragarse
mal un dulce, pero para ella, La Muerte, ya no era importante tal situación,
prosiguió con su última noche de trabajo, ella sabía que muchos la deseaban con
premura, y otros la odiaban, pues ella lo sabía muy bien, de apoco soltó de su
cadera un cincho negro de tela, el cual era muy largo, con paciencia giro y
giro, hasta que por fin el cincho negro de tela termino, la noche era opaca
casi sin ninguna respuesta, en poco tiempo alguien en un pueblo la necesitaba,
pero ella no hizo caso a la llamada en su vip, la pobre Muerte estaba cansada
de llorar por aquellos que no merecían la muerte, y conducirlos a un pasaje
filosófico de ellos mismos, aunque en el trayecto les tuviera que explicar que
solo existían dos, ya que no existían dos clases de luces, o dos clases de
oscuridad, o era luz o era oscuridad, algunos hasta deseaban conocerla por que
afirmaban que era la mujer más hermosa que habían visto, y en poco tiempo el
mundo la conocería como realmente era, pues la sotana de apocó revelaba la
verdad de la llamada y famosa “Muerte”.
La Chica de Labios Rojos, Cara Blanca y Cabello Negro
La negra sotana larga que se arrastraba en el suelo de
aquella penumbrosa habitación, revelaba a una mujer de piel blanca como el
papel para escribir una carta de adiós, de un amor no correspondido, la dulce
mujer lloraba en un silenció espectral, estaba vestida con un vestido blanco,
largo que definía sus curvas, sus ojos delineados en rojo, y sus labios del
mismo color, rojo sangre, en ese mismo instante en que ella, La Muerte, dejaba
a un lado su trabajo, y firmaba su renuncia dejando a un lado su guadaña, el
viejo proxeneta comenzaba a sufrir del corazón, La Muerte, cuando se disponía a
abrir la puerta, girando la manija, apareció Tragedia, la cual se sorprendió,
¡Muerte! ¿qué…a dónde vas? le pregunto, la Muerte, como ella es, no le
respondió, solamente negó con su cabeza, ¡estas renunciando! -le dijo-
Tragedia, a lo que la Muerte respondió con un sí, pero como siempre en
silencio, solo moviendo su cabeza, ¡qué mal esta esto!, yo no puedo dejar mi
trabajo -le dijo- Tragedia, La Muerte solo se detuvo por un instante antes de
salir por la puerta, pero nada la detendría, salió por la puerta la desconocida
mujer de vestido blanco traslucido como la luz de la luna, se fue a una montaña
lejana y desde allí observo, la Muerte no dejaba de llorar, Tragedia la
acusaba, de que sufrimiento tuviera mucho trabajo, entonces se reunieron,
Tragedia, Sufrimiento, y Esperanza, le mandaron un vip a la Muerte para que
volviera a su trabajo.
La Reunión Del Enigmático
12 de Diciembre, en un lugar solitario de día, se
sostuvo una reunión poco común, La Muerte explicaría al consejo de resueltos,
por que dejo su trabajo y porque no quiere volver, en la reunión llegaron los
de siempre, Tragedia, con su vestido sicodélico, Sufrimiento, con su traje gris
oscuro y corbata roja, también llegaron las chicas, así llamaban a las
Enfermedades, todas con diferente apellido, también llego Indecisión y
Decisión, los gemelos vestidos con sus trajes azules brillosos, y por supuesto,
estaba Esperanza y Desesperanza, las dos vestidas una con vestido negro y la
otra con vestido gris, sentada en un banco estaba la Muerte, llorando en
silencio, con su vestido blanco traslucido, entonces comenzó Sufrimiento con el
interrogatorio, ¡Muerte!, solo dime ¿Por qué?, ¿porque dejaste tu trabajo?, La
Muerte, solo se quedo callada, y negó con su cabeza, después comenzó Tragedia a
interrogarla también, poniendo un ejemplo de por medio, y comenzó con una fecha
en particular, la noche del 10 de Diciembre, el viejo proxeneta tenía que
morir, esa era su última noche, ¡no! pero tu tenias que irte llorando, ahora el
viejo está vivo y Sufrimiento no puede apretar mas la soga, porque solo sufrirá
mas y no morirá, ¿porque ¡tú! no quieres trabajar?, ¿porque que te detienes?, ¿
y no siempre ha sido frio tu corazón?, entonces la muerte, por fin abrió su
boca para responder al interrogatorio, ¡hoy responderé con la verdad! y no
tengo que mentir, porque no me sirve de nada hacerlo, -dijo- La Muerte ¡espere
como siempre a Tragedia!, pero me canse de lo mismo, entonces el “Jefe”, me dio
el permiso, el me quito mis llaves, me dijo que dejara mi trabajo, para que
aquellos lo apreciaran, y dejaran de morir, pues en algunos casos doy libertad,
pero en otros casos doy una falsa libertad, entonces acepte el acuerdo
previsto, hasta hoy muy pocos lo sabían, pregúntenle a Esperanza, ella ya lo
sabía y no dijo nada, y continuo La Muerte, así que, fue por mí, por mi
descanso que renuncie y por el contrato, muchos me tienen miedo, por que trazan
en sus mentes miles de caminos filosóficos sin fundamento, creen que la materia
inexistente es nada más que eso, pero solo ellos que tienen a Decisión para que
les explique, y no sea yo, La Muerte, que después que han muerto sea quien lo
haga, esto es todo.
Desde ese día, la Muerte Nunca más volvió a su
trabajo, se dice que camina entre las nubes, en la noche bajo la luz de la
luna, mientras Sufrimiento se le aumento el salario…. y a Tragedia también, el
viejo proxeneta vive en un limbo interminable, día y noche.
Describiendo a La Muerte, en esta Historia Corta, sin
llaves, y un contrato que muy pronto se cumplirá. Dejara la guadaña, se quitara
la sotana negra.
El Jefe, Dios.
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